viernes, 7 de marzo de 2008

¿tiene sentido el humor?

El absurdo, la contradicción, el ingenio ... y otros recursos, son la expresión que usa el humor para esconder un mensaje, una moralina o la pincelada de una intuición. Se esconde tras él lo que quieras encontrar si lo buscas con decisión y tozudez; o simplemente un chispazo intuitivo, desconocido para nuestras obtusas mentes; o un entrecejo fruncido, si observas y esperas un sentido a lo incomprendido. Lo más probable sea la risa boba.

Cierta poesía produce efectos parecidos, algunos pasajes musicales, pinturas y otros productos, hacen eco en nuestra alma, obligandola a manifestarse.

Es algo psicodélico si tiene el don de hacerte evocar vivencias o una "paparruchada" si solo tienes la sensación de perder tiempo. Y hay relatos para todo tipo de sensaciones.

Cuando vas profundizando, estos relatos te suelen dar ganas de llorar (tratas de enterder algo que se escapa y que intuyes que debe de estar contenido en él), como quitar capas de cebolla, al final no tienes nada, excepto el llanto; y tal vez sea desde esta "nada" el lugar donde comenzar a acercarse a este sabiduría (descondicionado)

En cualquier caso, la sonrisa esta asegurada con Nasrudín (Quijote y Sancho), al igual que es puesto a prueba nuestro del sentido del humor. Vale la pena probar esta mezcla de lo divino y humano; hasta puede ser adictiva.
En cualquier caso, solo experimentando se llega a comprender. Felices intuiciones

3 comentarios:

mikito dijo...

La última frase de tu articulo me ha hecho reflexionar, ¿por qué no nos atrevemos a tener los sentidos abiertos para empaparnos de la vida, para experimentar?, es cierto que solo a través de ello aprendemos y comprendemos y si eso sabemos que nos llena de contenido y nos aporta felicidad ¿qué nos impide hacerlo?, ¿por qué nos conformamos solo con esperar y no ser activos y arriesgar?

Serafín dijo...

Creo que para arriesgar la intuición tiene que ser algo más que una simple visión, tiene que confirmar el ocuolto anhelo interior.
Arriesgemos sólo en el momento que nos sintamos integralmente convencidos, sin la más mínima duda. Hasta entonce, disfruta con la vida; ya llegará el momento de ponerla a prueba.

Anónimo dijo...

Gracias por tu respuesta, la tendré presente y pensaré en ella. Mikito